Un presidente chavalo
Por: Génesis Hernández Núñez
En el libro “La otra cara de América”, el periodista Jorge Ramos hace un ejercicio de imaginación muy interesante: viaja hasta el año 2059 y cuenta que el presidente de los Estados Unidos es de origen latino y se llama Peter Martínez, pero eso no es todo, “Míster President” habla spanglish y sus discursos más largos duran menos de cuatro minutos.
Mientras leía ese capítulo llamado “1ero de Julio de 2059” pensaba en algo similar para Nicaragua, pero con un presidente chavalo pues nunca he entendido como en un país de muchachos como el nuestro, el último presidente joven haya sido Anastasio Somoza Debayle que cuando asumió el poder en 1956 tenía 31 años.
En las elecciones presidenciales de 2011 yo tenía 18 años y me tocó elegir entre dos opciones: Fabio Gadea, un señor de 80 años y Daniel Ortega que en ese entonces tenía 66 y, para ser sincera, no me identificaba con ninguno de los dos, así que a partir de entonces, tengo la esperanza de que para la próximas elecciones salga un joven o una joven de 25, 30 años que tenga como meta en su vida darle un verdadero cambio, un aire fresco a este país.
Al igual que Jorge Ramos, me imagino a un presidente o una presidenta joven con Facebook, con Twitter, que recorra el país con sus tenis, con menos protocolo y más acción pero sobre todo con ideas nuevas, con propuestas, con amor a la Patria y a su gente, con la suficiente energía física y mental para sacudir el polvo de este país. No sé si mi deseo se cumplirá hasta el 2059, pero quiero creer que un día mis hijos o nietos por n verán a un presidente o una presidenta con el que se puedan identificar.
