Carta abierta

Escrito por: ikaros

Todo comenzó por una inconformidad comunal, es decir es sentir de un pueblo que ha sido objeto del abuso de poder de gobernantes corruptos, uno tras otro siempre se han dado la gran vida a costa de un pueblo luchador, valiente que por muchos años se vio siendo objeto, un sangrado a borbotones de sus derechos comunes, causados por seres comunes es decir humanos que se creen inmunes, sin importar sus actos como olvidar el pacto que termino en un baño de sangre de cientos de hermanos que exigían sus derechos, no los escucharos más bien les respondieron con balas en la sien o en el pecho, hoy cuantos hogares hay desechos porque ya no está con ellos quien una vez salió en busca de una patria libre y regreso con bala de algún calibre que le segó su existencia.

Cuento inocente encarcelado por crimen su inocencia de creer que vivía en una democracia, cuanto asesino suelto amparado por la gracia de quien aplaude su crimen y le anima a seguir sus actos, ahora la pregunta es qué tanta sangre se ha de derramar para que una patria que nunca ha sido libre abra sus alas y vuele sobré un mar azul y un cielo blanco, cuanto más ha de soporta una nación condenada a la pobreza por sus regentes, a ellos no les importa mientras puedan llenar sus arcas, cundo su única forma de gobernar es el miedo tarde o temprano se inclina la balanza.

Hasta cuando el sol saldrá sobre una patria libre, donde el pobre tenga oportunidad de crecer sin pertenecer a un grupo político, donde se valore tu esfuerzo no el color de la bandera que cargas, pueden estar orgullosos de algo ser el único país donde te condenan por cargar con tu bandera, no solo eso convertir a la organización que se supone debería proteger al pueblo en su verdugo, luego que el ejército nicaragüense será otra vez el ejército sandinista, se me olvidaba ellos son cómplices de las matanza, aunque lo nieguen, la pregunta es a quien pedir ayuda a la policía no lo creo ellos se enorgullecen de ser la policía sandinista y si el ejército quisiese ya hubiese hecho algo a parte de callar y pretender que aquí no ha pasado nada.

La pregunta sería hasta cuando soportara estos agravios la nación, será hoy será mañana, pero entre más tarde más grave serán las consecuencias, hasta luego y recuerden una nación libre yace en un corazón lleno de coraje y en unas palabras sinceras, sin tapujos o mentiras, allí yace quien en realidad ama a su prójimo, no en aquel que te incitan a orar mientras queman tu casa.