La corrupción

Por: Douglas Gabriel Corrales flores

Hoy en día en nuestra bella Nicaragua se encuentra postrada en todos los ámbitos una problemática que nos encierra e incumbe a todos, esta es “la corrupción”, la cual vine siendo como el fin de una democracia participativa donde todos nos vemos violentados y nuestros derechos fundamentales se ven violados por este simple motivo.

La corrupción inicia en nuestros centros de estudio, cuando las normas no se cumplen a cabalidad o sino por el motivo de la avaricia que crea una mentalidad monetaria que acaba con la moral de las personas.

La corrupción se ve ligada más que todo a lo que es el estado y encierra grandes ligaduras a la misma tales como el tráfico de influencia y el abuso de autoridad que violentan a la ciudadanía de ejercer un derecho a cabalidad.

La corrupción, un cáncer en la sociedad, se encuentra presente en el ámbito ciudadano y policial cuando la Policía Nacional infringe las normas de tránsito por ganar “sobornos”.

En el tráfico de influencias cuando se ve ligada en el ámbito de todo lo que encierra el poder judicial, policial, el pago de impuestos, la solicitud de una plaza de empleos, etc. Da pena ver como ciudadanos nicaragüenses tenemos que someternos a la humillación que crea esta problemática ante un gobierno meramente ciego que es participe de esta corrupción.

La evidencia más palpable en la historia actual de nuestro país es donde un presidente no respeta ni nuestra máxima norma nacional que está por encima de todo nuestra insigne, La Constitución Política. Esto es lo que a todos nos indigna cuando por medio de la corrupción no se nos permite expresarnos o simplemente pensar de forma diferente a los que ejercen el poder de manera arbitraria.

Que indignante es ver como una persona en nuestro sistema judicial es sentenciado a años de prisión injustamente porque se le acuse de Peculado Millonario en contra del estado cuando realmente no tuvo nada que ver y como un ex alto funcionario del gobierno comete el mismo delito siendo este culpable a vista de los demás y simplemente se le destituya de su cargo esto es algo meramente indignante e irrefutable para nosotros el pueblo.

Para finalizar solo puedo decir alcemos nuestras voces en contra la corrupción y digamos basta ya de esta.