Yo decido a quien amar
Por: Ivan Matuz Blandón.
Todos tenemos derecho de elegir con quien queremos compartir la vida, nadie está obligado a ser heterosexual sólo para satisfacer a los demás y cumplir con estereotipos sociales que no permiten la autorrealización de la persona, sino que reprimen su felicidad.
El lesbianismo, la homosexualidad y la bisexualidad son preferencias sexuales totalmente normales, claro que en nuestra sociedad forman parte de señalamientos, burla y discriminación por la falta de tolerancia y el irrespeto que existe. Pero, lo más importante es sentirte orgullosa(o) de lo que eres.
El amor es espontaneo, no pueden negarse los sentimientos. Es imposible decirle al corazón que evite acelerar sus movimientos por alguien que te atrae y dejar de pensar en esa mujer u hombre que despierta en vos ese afecto único.
Aunque, la iglesia esté en contra de la diversidad sexual, los derechos humanos están por encima de todo precepto religioso. Así que, tienes el derecho y la libertad de decidir a quién amar, hazlo con sinceridad, entrega tu corazón y se responsable, recuerda que eres dueña(o) de tu vida. Para concluir, medita el siguiente pensamiento:
“Cuando no se vive como se piensa, se acaba pensando como se vive.”
Gabriel Marcel.