Seleccionar página

Salud mental y autocuidado

Salud mental y autocuidado

Escrito por: Yajaira Gutiérrez Orozco
Psicóloga infantil y de adolescentes

Desde que estamos en el útero, los seres humanos emprendemos un proceso de cambio que continúa durante toda la vida y no se detiene. Pasamos de ser una célula única a ser una persona que vive, respira, piensa y habla, pasamos por cambios durante la vida que tienen aspectos en común; las/los bebés crecen y se transforman en niñas/os, que siguen creciendo hasta convertirse en personas adultas que comparten características humanas, que a su vez, siguen pautas comunes.

Comprender el desarrollo de las personas a través del ciclo vital puede ayudar a las personas a entender y manejar las transiciones de la vida: la niña/el niño que recién aprende a ir al baño sola/o o que va a la escuela por primera vez, la mujer que vuelve al trabajo después del permiso de maternidad, la persona que cambia de carrera o que está por jubilarse, la viuda o el viudo que afrontan su pérdida, la persona que lucha con una enfermedad terminal.

Durante cada etapa del ciclo vital, tenemos experiencias y vivencias que suscitan cambios y por tanto, van aportando a nuestro desarrollo, porque nos invitan –y a veces obligan- a adaptarnos. Ese “adaptarnos” significa aprender a responder de una u otra forma a los distintos estímulos que se nos van presentando, y cómo nos adaptamos depende de las diferencias individuales: sexo, salud, inteligencia, temperamento, personalidad y reacciones emocionales, así como del contexto: casa, comunidad y sociedad en que vivimos, las relaciones que cultivamos, la escuela a la que vamos y a qué dedicamos el tiempo libre.

La Salud Mental no se centra – o no debería de hacerlo – en su totalidad en el abordaje por trastornos mentales y enfermedad – aunque si es importante hacerlo -, sino en fomentar en las personas un estado de bienestar en el cual el individuo es consciente de sus propias capacidades, puede afrontar las tensiones normales de la vida, puede trabajar de forma productiva y fructífera y es capaz de hacer una contribución a su comunidad.

Por tanto, hablar de salud mental es hablar de prevención y autocuidado. El auto-cuidado es la práctica de actividades que los individuos realizan en favor de sí mismos para mantener la vida, la salud y el bienestar; implica autoconciencia y autoconocimiento, así como reconocer:

  1. Las necesidades tanto físicas como psicológicas.
  2. Los problemas reales o potenciales de salud.
  3. Las competencias y habilidades personales.
  4. Las actitudes y creencias o filosofía de vida.
  5. Los factores que limitan o impiden el aprendizaje.
  6. Los recursos de apoyo de que la persona dispone.

El autocuidado también implica planificación y puesta en práctica, para esto podemos tomar en cuenta los siguientes pasos:

  1. Establecimientos de objetivos a corto, medio y largo plazo.
  2. Planificación de las actividades concretas a realizar.
  3. Determinar las prioridades de actuación.
  4. Identificar los recursos de apoyo disponibles.

Es de suma importancia reconocer que diariamente y a cada momento cada persona toma decisiones con respecto a su autocuidado, y estas influyen directa o indirectamente en la propia Salud Mental. Por ejemplo, la higiene del sueño, la cantidad de tiempo que se descansa, hábitos de alimentación -¡qué importante es desayunar!-, las relaciones que se establecen, hablar o callar ante una situación difícil, las actividades lúdicas que se realizan o no, por mencionar algunas.

¿A quién podés recurrir para saber más sobre salud mental y plantear estrategias de autocuidado para vos?

Podés hablar con una/un profesional de la salud mental, como una psicóloga/un psicólogo o un/a psiquiatra sensibilizado sobre el tema. Como profesionales reconocemos que cada aspecto del desarrollo afecta a los demás, y en ese sentido, comprendemos la interrelación existente entre la dimensión biológica, la psicológica, la social y la espiritual de las personas, lo que nos ayuda a ver a la persona desde su contexto para facilitar y acompañar procesos de forma adecuada. Sin estigma y sin miedo, hablemos de Salud Mental.

Sobre el Autor

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Videos Recientes

Cargando...

Revista digital