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Mujeres en Nicaragua

Mujeres en Nicaragua

Por: Samantha Bendaña

“Ahora resulta que no solo somos las víctimas, sino también las culpables de nuestras propias muertes”

El pasado 10 de julio fue el día oficial de “Acciones por la vida de las Mujeres”, pero ¿qué fue lo que pasó como para que se armara semejante revoluta y accionar de tantas miles de mujeres alrededor del país exigiendo respeto y justicia por nuestras vidas?

Datos presentados por el diario La Prensa nos dicen que han ocurrido entre 55 y 61 femicidios en lo que va del año en nuestro país, y es que los efectos de nuestra cultura conservadora, machista y patriarcal han llegado al extremo. Soy mujer y  joven al igual que millones de mujeres en nuestro país y coincido en que ser mujer no es fácil. La discriminación, el irrespeto, el machismo, la inseguridad y el acoso sexual al que estamos expuestas día a día no es fácil. Caminar por la calle y que te digan: “¡Adiós amor! ¿Te acompaño?” ¡NO es un halago!

La violencia hacia las mujeres tiene muchos rostros, no se restringe únicamente a recibir golpes. La violencia física (golpes, jalones de pelo, cortaduras) y la violencia sexual (abusos sexuales, trata de personas, violaciones) podrán ser las más denunciadas, pero no las únicas, ni las más comunes. La violencia patrimonial es algo que vivimos en nuestros propios hogares cuando en el matrimonio o la unión de hecho estable se inscribe todo a nombre del hombre y la apropiación de bienes es desigual; y que decir de la violencia psicológica con las amenazas, humillaciones, la manipulación o el control por parte de las parejas, esposos o conyugues.

No creo que “las mujeres casadas gocen estadísticamente de mayor seguridad que las solteras o unidas”, tal como lo dijo recientemente en un artículo un Ex Ministro de Educación. Mucha pena me dio leer este argumento tan soso para justificar los femicidios, pues ahora resulta que no solo somos las víctimas, sino también las culpables de nuestras propias muertes. Como si ser libres y autónomas fuera sinónimo de decirle a nuestras parejas o amigos: ¡Asesíname y abúsame por favor! ¡Que machista! ¡Edúquese Sr. Ex Ministro!

Vivimos en una cultura que nos ha enseñado que las mujeres debemos ser sumisas, que el hombre es el principal proveedor del hogar, que nuestro cuerpo es un objeto sexual, que las tareas domésticas y la crianza de los hijos es solo nuestra responsabilidad y esto ha desembocado en la muerte de todas estas mujeres madres, hermanas, amigas, amadas y extrañadas por sus familias y por los hijos que dejaron en la orfandad. ¡Basta ya de VIOLENCIA! ¡Basta ya de cultivar una sociedad misógina y patriarcal! ¡Basta ya de más femicidios!

Cultivemos una sociedad equitativa, justa, con valores, afecto, respeto, solidaridad, honestidad, donde tengamos presente que las mujeres tenemos derechos, que debemos tomar nuestras decisiones sobre nuestra vida, nuestras acciones, nuestra salud, que nuestro cuerpo es nuestro y no propiedad de nadie. Exijamos justicia por la vida que les arrebataron a todas estas mujeres. ¡Empoderémonos de nuestros derechos! Hoy por ti, mañana por mí.

Felicidades a la Iniciativa “Acciones por la vida de las mujeres”, es un gran ejemplo que demuestra que la sociedad civil y ciudadanía de nuestro país tiene mil y una razones en común por las que luchar y levantar la voz.

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