El Estado de Derecho en Nicaragua.
Escrito por: Víctor González
El Estado de Derecho en Nicaragua, está en un estado crítico, como sabemos nuestra democracia, y el Estado de Derecho se vio alterado con el retorno de Daniel Ortega al poder, que implantó un régimen dictatorial, que controla los 4 poderes de nuestro país, es decir, es nula la existencia de la división de poderes, por lo tanto, en un gobierno dictatorial no existe el Estado de Derecho.
El Estado de Derecho es un producto y una larga evolución en la que se fueron delineando y afirmando los principios que hoy contribuyen a establecer sus contornos más significativos como lo es el de la sujeción de los gobernantes a la ley y el respeto a la división de poderes, cosa que en Nicaragua lamentablemente hoy es más que inexistente, ya que se generó un gobierno absoluto y totalitario que viola la Constitución Política constantemente. Para que en Nicaragua exista un Estado de Derecho, deben cumplirse al pie de la letra cada una de las leyes que manda la Constitución Política, pero, como sabemos al leer nuestra constitución nos podemos dar cuenta de que esta es constantemente violada, un claro ejemplo es cuando Ortega reformó la constitución en su artículo 147, y hoy en la actualidad, el artículo 30 de nuestra Constitución Política se basa en la libertad de expresión, cito, “Los nicaragüenses tienen derecho a expresar libremente su pensamiento en público o en privado, individual o colectivamente, en forma oral, escrita o por cualquier otro medio”; bien sabemos, la libertad de expresión en Nicaragua ha sido destruida por el régimen, iniciando con dominar todos los medios de comunicación, reprimir protestas, censuran medios independientes, entre otros, cuando el mandatario o gobierno no respeta las leyes, se puede deducir que no existe Estado de Derecho.
Uno de los elementos esenciales de una república es el Estado de Derecho, el imperio de la ley, la seguridad jurídica de la propiedad, la protección legal de los ciudadanos ante los abusos del poder, estos atributos no existen en Nicaragua, lo cual es una aberración.
La realidad de Nicaragua, es que hay un Estado dominado por el régimen dictatorial Ortega – Murillo, que en los poderes restantes tiene a sus allegados como lo son: Alba Luz Ramos – Poder Judicial, Gustavo Porras – Poder Legislativo, Lumberto Campbell Poder – Electoral sucesor de Roberto Rivas.
