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La unidad no es una utopía, pero debe trabajarse.

La unidad no es una utopía, pero debe trabajarse.

Escrito por: David Turing

Lo primero que debemos hacer, es estar claros de que nuestro país necesita una transformación profunda. Debemos abandonar las ideologías cancerígenas que han destruido nuestra nación. En la medida que nos reconozcamos como humanos y ciudadanos, tendremos más oportunidades de un futuro mejor. 

 

Nuestro problema es que somos una sociedad caudillista; que deseamos que un “salvador” haga todo por la nación y nos terminan engañando por nuestra falta de memoria histórica, así como nuestra apatía sociopolítica.

 

Asumir nuestra cuota de responsabilidad. La degradación del sistema político es culpa de TODOS (excepto los jóvenes menores de 26 años), aceptamos la corrupción, la ineptitud, el abuso como algo normal. Muchos ingenuamente confiaron en un pseudo revolucionario y otros celebraron que ratas como Aleman pactaran acosta de entregar el país a maleantes vestidos de luchadores sociales.

 

Ahora estamos en un momento histórico, el cual definirá el rumbo de nuestro país por los próximos 50 años. Hay un nuevo despertar, una nueva conciencia la cual se está pagando a precio de sangre y cárcel. 

 

La nueva Nicaragua está formada por cientos de grupos heterogéneos, los cuales tienen diferentes visiones y misiones. La unidad solo se construye si todos los grupos entendemos y creemos en los siguientes conceptos:

 

#Justicia: lo que debe hacerse según el derecho, la razón y la equidad. Este es el primer gran eje de nuestra unidad. Pedir Justicia por los asesinados y justicia contra los abusos del poder debe ser el gran objetivo de todos. Ningún grupo que se proclame Azul y Blanco debe excluir la justicia como el primer paso en la construcción de una nueva sociedad.  También debemos desterrar la venganza de nuestra agenda. El brazo de la justicia debe alcanzar a cada paramilitar, policía, militar, excombatiente que ordenó, coordinó, cooperó y disparó contra el pueblo.

 

#Verdad: Proposición que no se puede negar racionalmente. 

La verdad que debemos aceptar es que se inició un cambio. La verdad es que nos enfrentamos a un grupo mafioso, dispuestos a seguir bañando de sangre la bandera con tal de mantenerse en el poder. La verdad es que no queremos una nueva guerra civil ya que es repetir errores del pasado. La verdad es que los empresarios fueron cómplices del régimen y algunos de ellos no sienten el dolor de nuestros muertos. La verdad es que debemos unificar a los grupos sociales para mostrar nuestro verdadero poder al régimen y a los empresarios. La verdad es que desde el 18 de abril el pueblo obtuvo la victoria política, pero sufrimos una derrota militar. La verdad es que los estudiantes, feministas, comunidad LGBT, y la iglesia son los que dan la cara por el pueblo y los que mantienen la llama encendida. La verdad es que la mayoría de la población sigue indignada pero nuevamente es presa del miedo. La verdad es que cada ciudadano que es encarcelado debe enfrentar las injusticias casi en el abandono y en la indiferencia de los que tenemos miedo de seguir su ejemplo. Otra verdad es que deseamos la salida del régimen, pero eso solo se logrará si todos los movimientos sociales logramos organizarnos y paralizar el flujo de dinero al gobierno. Debemos recordar que los sacrificios que hacen unos pocos valen la pena para muchos.

 

#Honestidad: Seres razonables, rectos, honrados y probados. Todos los diferentes actores sociales debemos mostrar que no ocultamos nada, que nuestros recursos no provienen de malos manejos y nuestros representantes deben ser austeros y libres de corrupción. 

Nadie tiene una agenda oculta y nadie lucha por un cargo. Nicaragua necesitas representantes que no se crean indispensables, que sepan escuchar a los demás y busquen soluciones integrales a nuestros problemas.

 

#Conciencia Crítica: Sentido moral y ético que nos permite analizar y separar el bien del mal. Debemos poder identificar cuáles son nuestras debilidades, nuestros errores. Uno de nuestros principales problemas es la falta de articulación, así como la desconfianza que surge del hecho que no conocemos a los otros actores azul y blanco.

 

Los pasos a seguir:

 

Unificar nuestros criterios e identificar aquellos activistas en los cuales tenemos confianza. Es urgente seguir de manera coordinada un plan de desobediencia fiscal, tributaria, así como el paro de consumo. La desobediencia civil es el camino para mostrar nuestra fuerza al régimen y al gran capital.

 

Mi propuesta es que coordinemos acciones con @YaserMorazan, @vandaliconic, @pxmolina, @piensosoyo, @aufstand_mjek, @LoboMy, @RubeniaBorge

 

Cada uno de nosotros debe crear una red segura de ciudadanos azul y blanco, personas de entera confianza y decididos a formar parte de la lucha cívica. No es necesario exponer su vida simplemente debemos ser capaces de abstenernos de participar de la “Normalidad” del gobierno y cuando sean necesario todos participar de los paros de consumo.

 

Cuando estemos organizados como sociedad y coordinadamente mostremos la capacidad de paralizar la economía tanto el régimen como los empresarios respetarán el deseo popular.

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