La tarea de los estudiantes

Por: José Luis Vásquez

Nicaragua es un país rico en materia legislativa, y la gente no lo sabe… Pero eso no es nada digno de asombro en estos días, y es que, mientras menos sepa la población sobre sus derechos, mejor es para el gobierno porque ¿Quién va a reclamar lo que ni siquiera sabe que es suyo?

Todo está fríamente calculado para que no sepamos nada de leyes. Sólo remontémonos a nuestra educación primaria: ¿Nos hablaron sobre el código de la niñez?, ¿Nos dijeron que desde niños tenemos derechos? O regresemos a la secundaria, ¿Nos hablaron de sexo abiertamente y sin prejuicios? Porque ese es nuestro derecho. Y en la universidad ni se diga, ¿Nos han hablado sobre la Ley Integral de Desarrollo de la Juventud? O ¿Te han hablado sobre Libertad de Asociación?, sí, también son nuestros derechos y sí, el sistema no quiere que los conozcamos porque no le conviene.

Según el Arto. 49 de la Constitución Política de Nicaragua, todos tenemos derecho a constituir asociaciones, sin importar si sus fines son políticos, sociales, económicos, culturales o religiosos, siempre que las acciones de estas contribuyan al desarrollo de un mejor país. Aún más sorprendente es que el Estado debe garantizar que no haya obstáculos que impidan la consolidación de estas organizaciones.

Cuando pienso en este derecho, sólo se me viene a la mente las agrupaciones estudiantiles, que son las que nosotros los estudiantes deberíamos aprovechar. Recuerdo que a finales de 2008 e inicios de 2009 se dio un estallido en las organizaciones estudiantiles, UNEN se consolidó como la más fuerte. Pero, en la Universidad Centroamericana (UCA), se inició un movimiento denominado “NO” y este surgió por ataques de miembros de UNEN. Fue una organización que nació de la inconformidad de quienes se oponían a las decisiones que UNEN tomada y las acciones que estos emprendían, en contra de quienes no acataban las reglas o en contra de quienes no pensaban igual a ellos.

Pero, ¿Qué pasó con “NO”?, ¿Por qué no se han formado más organizaciones dentro de la UCA?, ¿Será que todos los estudiantes están de acuerdo con todas las decisiones de esta casa de estudio? Pues, poco después de que esta agrupación de estudiantes se formara, las autoridades de la UCA prohibieron terminantemente la formación y actuar de organizaciones estudiantiles dentro de la universidad.

Pero, no quiere que se interprete que ataco a la UCA, no es ese el objetivo. De hecho, en todas las universidades existe inconformidad por las decisiones que se toman sin consultar a los estudiantes. No todo es felicidad, ni siquiera la gratuidad garantiza que la juventud esté contenta con el sistema de educación superior. Pero, ¿Qué pasa?, ¿Dónde están esos jóvenes con conciencia crítica?, ¿Por qué no se organizan para exigir cambios?

La respuesta a estas preguntas, creo que es un tanto obvia. El gobierno quiere mostrar que todos estamos contentos con este nuevo sistema, quiere que la imagen de juventud que se vende de Nicaragua, sea de una juventud feliz, contenta, agradecida y complacida. Aunque, y me atrevo a decirlo, la mayoría no piense así.

Lo que pasa es que el miedo no los deja actuar, y no los culpo. Está más que comprobado que en este país, si no estás a favor, es porque estás en contra, y si estás en contra debés ser atacado y hostigado hasta que te retractés de lo que decís y te unás a la consigna de “la mayoría”.

Mi llamado es a atrevernos, a aventarnos a cumplir nuestros derechos. Si algo no nos parece, estamos en la libertad, al menos legal, de unirnos a quienes piensan como nosotros, sin temor, porque contario a lo que nos quieran hacer creer, no estaremos delinquiendo, estaremos haciendo cumplir la ley. Cosa que el gobierno no hace, cosa que el gobierno debería hacer, cosa que el gobierno podría copiarnos.