Eumomota Superciliosa
Por: Omar Quinto
Soy descendiente de Fénix
elegí el encierro voluntario
huí de cazadores furtivos
huí bajo verdes copas
huí sin alzar vuelo.
Cuento los meses en cautiverio
desplumándome las alas
a veces una por día
a veces una por hora.
Es mejor pasatiempo
que freír mis retinas con veneno.
Soy esa ave voladora y huesos porosos
con cola de raquis desnudo
visto plumaje tan elegante cual mi nombre.
Ya no vuelo ni canto
porque he olvidado cómo
sólo anido y descanso
pero he olvidado por qué.
Sueño con pastar en el viento
de días cuando caminar era capricho
las nubes eran mi confesionario.
Mis ojos vibran por sentir el sol
me han salido plumas desteñidas y canosas
ay mi Nicaragüita…
He escrito este epitafio mientras vivía.