
Crónica de Abril

Por: AGA
Te recuerdo Nicaragua, con un golpe en la cabeza
querían robarte la vida con una bala y una piedra
ansiaban sangre inocente cual endemoniadas hienas
pero al igual que Caín, también tendrán su condena.
Se repartían tus prendas, como soldados del calvario
te creían derrotada cuando ardió el crucifijo
más el fallido sortilegio se observó burlado
la furia de tu gente acrecentó entre las cenizas.
Recuerdo cuando tu suelo se convirtió en lava
la tierra ese Abril abría su vientre
recogió caídos entre sus entrañas
los cuales por siempre gritarán presente.
Vi a tus hijos huyendo protegiendo la vida
con la maleta cargada de odio y amenazas
mientras vos agitada e inquieta, buscabas una salida
te vi llorar, Nicaragua, en cada triste despedida.
Te vi amordazada, Nicaragua, pero no vencida
estabas tras las barras en las mazmorras de la mentira
tus custodios eran verdugos, secuestradores de la libertad
pretendían callarte, pero no podían
más fuerte que un grito embustero es un susurro de la verdad.
Te veo hoy Nicaragua con tus hijos en la espera,
te abrazan con la nostalgia de ver libre tu bandera,
hastiados del tiempo, intentando respirar
aún con menguadas fuerzas, la patria vamos a vengar