Por: Luis Ricardo Arevalo Arias
A veces es más rentable desistir de estudiar y emprender en el campo de la comunicación y la informática. Los nicaragüenses no somos dados a trabajar en las redes sociales apelativamente facebook, x, instagram, tik tok, pinterest, y YouTube. Todos quisiéramos ganarnos la vida como oficinista al tododar de un aire acondicionado y refrescandonos con una jarra de gaseosa bien helada. Por una cuestión de tercermundo desconocemos las ventajas y posibilidades de los paradigmas de la comunicación. Ser influencer en Nicaragua es el oficio de la viuda negra ante un caudal de espectadores a nivel internacional El estado ha marcado la pauta en la regulación de este rubro tecnológico, aprobando sin precedente la ley de ciberdelito que manda a la cárcel a quienes delincan aprovechándose ilegalmente de dicho recurso.
Tengo mi canal en Youtube denominado Pantallita cultural con una serie de reportajes culturales en el campo internacional.