Fama ó formación 

Por: Jaime Rivas Carvajal

Formo parte de una generación que crece rodeada de pantallas, redes sociales y fama momentánea. Pero también soy creyente de que el verdadero valor está en lo que realmente somos.

Mi familia me ha enseñado que la clave está en valorar lo que uno construye por dentro. Su historia y experiencia me han influenciado a ser una persona que aproveche las oportunidades que se presentan.

La fama es rápida y frágil. La vemos en este tiempo donde todos quieren ser virales, conocidos y alabados, pero pocos son los reconocidos por su trabajo y esfuerzo, dedicación y empeño, disciplina y sueños.

La formación es lo que nos sostiene cuando la vida te da la espalda y todo falla, pues te brinda conocimiento, herramientas y esperanza.

El conocimiento es algo eterno. Por eso, siempre insto a las personas a prepararse intelectualmente. Hoy tenemos acceso, mediante el uso correcto de la tecnología para el crecimiento personal.

En mi caso, mi familia —sus dolores, sus luchas, sus enseñanzas, su vivencia y experiencia— me ha impulsado a formarme para algún día ayudarlos como merecen. Por eso, no solo me preparo estudiando, sino también edificando.

Tengo proyectos que nacieron del deseo de transformar e inspirar. Esto me llevó a desarrollar EVANVIMAR, en honor a mis abuelos: Everto Rivas, Ana Julia Guzmán, Vicenta Melgara y Martin Carvajal, como un espacio inefable, con variedad de secciones.

 Espejos del Tiempo, un hermoso colectivo de poetas, además de otros proyectos sociales, culturales y artísticos.

En lo profesional, como futuro administrador de empresas, psicólogo y diplomático, aspiro a desarrollar FAMENDS, así como otros programas y proyectos de impacto.