El futuro incierto de Nicaragua
Escrito por: Víctor Herrera
Ya casi 3 meses continuos de protestas, el tirano, el dictador, el “comandante”, se aferra al poder dejando centenares de asesinados por turbas paramilitares, juventud sandinista y policías. Una crisis sociopolítica que deja a la deriva el futuro de nuestro país, Nicaragua. Millones de nicaragüenses se preguntan, ¿Qué vendrá después?
El pueblo nicaragüense tiene que proponerse no dejarse cegarse nunca más, no dejarse engañar con discursos de soberanía que solo maquillan la corrupción, el nepotismo, la tiranía, la riqueza. Todo empezó con los estudiantes, esos jóvenes que despertaron antes que millones de nicaragüenses, esos estudiantes que protestaron por el incendio de la Reserva Indio Maíz, esas protestas que fueron reprimidas, queriendo callar la voz de esos jóvenes que ya habían despertado, y ahora esos jóvenes son el ejemplo de millones de niños, niñas, adolescentes, adultos, ancianos. Esos jóvenes que se levantaron y fueron cien, y al día siguiente fueron millones los que estuvieron protestando por una Nicaragua libre, por justicia, por democracia.
El pueblo de Nicaragua tiene que dejar de idolatrar a los gobernantes, lo que tienen que hacer es participar en la democracia, ya que el pueblo es el que quita y pone a sus gobernantes, y cuando estos gobernantes irrumpen el orden del país, cuando estos gobernantes delinquen, el pueblo tiene todo el derecho de quitarlo. La única manera de no repetir los errores del pasado, es brindarles a los niños, niñas, jóvenes una educación primaria, secundaria y terciaria excelente, un sistema confiable y democrático, enseñarles la verdad y no dejarlos engañar, no permitiendo más regalos, más nepotismo, que se enseñe a luchar dignamente por lo que se quiere y no dar trabajos por afinidad política sino darlos por conocimientos y empeño.
El rol de los jóvenes, hoy, mañana y para siempre en la política tiene que ser importante, tiene que ser digno, donde digamos con orgullo, me lo merezco, un rol en donde en su lucha se ponga en práctica la justicia, la democracia y la libertad de expresión, ya que los jóvenes son los únicos que no se dejan engañar, ni comprar por un gobierno corrupto, los jóvenes no se dejan callar, ni se dejan reprimir, luchan hasta el final por la libertad. Evitar que, entre un dictador, un populista, un tirano al poder que cause daño, sufrimiento, asesinatos al pueblo nicaragüense que tanto ha luchado.
Los jóvenes nos dejan un pensamiento revolucionario, nos dejan virtudes revolucionarias, nos dejan carácter, voluntad, tenacidad, espíritu de trabajo, un ejemplo que debe ser un modelo para nuestro pueblo, si queremos expresar como aspiramos a que sean nuestras futuras generaciones debemos decir que sean como los jóvenes estudiantes que lucharon en abril. Sin una sola mancha es su conducta y actitud. Nuestras futuras generaciones tienen que ser como esos jóvenes, que lucharon, lloraron y murieron por su patria.