Lo que enfrentamos los adolescentes
Por: Justin Enoc Sánchez
Ser un adolecente en Nicaragua no es para nada fácil, en un país que no tiene una ideología libre y está llena de prejuicios de todo ante cosas como la homosexualidad, el aborto, el machismo, el feminismo etc.
Esto afecta al desarrollo del país y a nosotros como ciudadanos, no nos permitimos avanzar como sociedad, muchas veces tenemos miedo de pronunciarnos o dar nuestra opinión sobre x cosa en frente de nuestros padres, maestros, familiares o hasta con nuestros propios amigos, por miedo a que me juzguen.
Aunque hay cosas buenas, aun así, me gusta mucho divertirme con mis amigos de una manera sana, me gusta mucho ir al colegio por que los veo y es mi último año necesito estar con ellos, porque ya no tendré más tiempo luego, también estoy preocupado por mi carrera, en gran parte por la presión que tengo ahora y no paro de pensar en ello, los trabajos del colegio y muchas otras cosas.
Mi deseo es ser un gran escritor, yo escribo poesía y me gusta mucho todo lo que tiene que ver con ese arte, ya he escrito muchos poemas y un libro que estoy escribiendo (esta en pausa porque tengo muchos trabajos en el cole) pero yo siento que no hay oportunidades para soñadores como yo, no obstante, me gustaría estudiar alguna otra cosa aparte de literatura me apasiona el cine, pero igualmente no veo oportunidades.
También siento que las personas con depresión son algo que se toma como broma en este país. No hay mucha ayuda para con estas, realmente no sé si tengo algún problema psicológico por qué no lo tengo diagnosticado, pero yo creo que padezco de ansiedad ya que he investigado algo, no quiero decirles a mis padres que me lleven al psicólogo por lo mismo del que dirán.
Sobre la situación actual del país creo que no nos hemos dado la oportunidad de informarnos bien, con todas esas noticias amarillistas de los dos «bandos» no pertenezco a ninguna, aunque sé que mi deber como ciudadano es dar mi voto, aun no sé, entonces no tengo una respuesta concreta. Solo siento que esto no es el fin de este país, hay mucho más por avanzar.