El inicio de la Nicaragua que todos deseamos.
Por: Fernando Luna
A causa de estos acontecimientos que han estallado desde el mes de abril del año 2018, acontecimientos que no ha cesado, por más que el gobierno dictador intente suprimir, por esas mismas razones me ofrezco con total interés propio a presentarse como un precandidato al gobierno de Nicaragua, soy Fernando Rafael, cédula de identidad 300-300000-0002C, con 26 años de edad, originario de Boaco, sin antecedentes penales, soltero y con el deseo de comprometerme al servicio total a Nicaragua, cuento con una carrera técnica en agronomía, con bajos recursos económicos, pero con los mejores deseos de ver a mi país libre de la corrupción política y social que se pueden ver arraigadas hoy en día.
Estoy dispuesto a seguir y agarrar el buen ejemplo del presidente del salvador, ejemplo que nos muestra que se puede gobernar entregando en becas el salario ganado, siempre he tenido el deseo de ver una Nicaragua libre de la tradición contaminadora que tanto daño hace al medio ambiente, no depositar la basura en su lugar, quemar para poder sembrar, despalar sin reemplazar los árboles talados, el uso indiscriminado de productos químicos que repercuten en la salud de nuestra sociedad y descendencia, esto como un fragmento de lo ambiental.
En lo social gestionaría proyectos que permitan a las personas de los mercados poder trabajar en lugares dignos, como también folletos que puedan brindar la seguridad y comodidad de las personas que usan el transporte público desde los sitios más remotos de las zonas rurales hasta lo más urbano de las ciudades, esto sin antes de la reparación y mantenimiento de carreteras en mal estado, sin omitir la gran necesidad y demanda que presentan las comunidades que producen granos básicos, materia prima, comunidades que no tienen acceso a una carretera, a una asistencia técnica para los problemas que se le presentan en la producción de la ganadería y agricultura, como tampoco tienen el acceso a un centro médico, existen poblados que por falta de una carretera asfaltada su comercio no prospera convirtiéndose en un sacrificio poder surtir sus ventas.
En lo cultural, apoyará las actividades y tradiciones de nuestra amplia cultura, esto acompañado del turismo donde hay lugares que con una inversión moderada ya serían denominados lugares turísticos, brindando a estos una seguridad y comodidad para su acceso como también su estancia en ellos.
El sueño de una nueva capital no creo que sea solo míos o que está solo en mis deseos, en Managua nuestra actual capital no presenta las condiciones en seguridad frente a problemas sísmicos, para lo cual es necesario el estudio de los lugares más seguros donde se pueda llevar a cabo la construcción de una nueva capital. Recordar que todo lo que he hablado está basado en nuestra realidad, que esas inversiones generarán lo suficiente para pagarse solas y que el pueblo será el único beneficiado en todo esto, los pobres del campo y la ciudad tienen que ser la prioridad.